La salud de los ejecutivos. Una propuesta de atención

Resumen

El presente trabajo corresponde a una alternativa para mejorar el desempeño de los equipos directivos, basado en la atención a la salud en diferentes campos: físico, mental, emocional, espiritual y gerencial. El diseño de esta propuesta, considera al personal directivo de una organización dentro de un macrosistema social, con gran capacidad de transformación y alto desempeño; y a sus directivos como un elemento estratégico. La salud se conceptualiza como la condición de bienestar, que permite el desarrollo del potencial humano, indispensable para la salud de una organización; y corresponde al medio para lograr su máximo desempeño en el cumplimiento de su misión. Los programas de salud pública, no incorporan acciones de salud para directivos (grupo de riesgo específico); este trabajo promueve un programa de salud integral, preventivo y de bienestar; a diferencia de la oferta de servicios existente, y que es parcial y restaurador. Las condiciones de salud no sólo representan la posibilidad de vivir diversas experiencias gratificantes, también son altamente rentables para la organización.

Palabras clave: salud, ejecutivos, organización y organización saludable.

Abstract

This work stands to an alternative to improve the performance of management teams, based on the healthcare in different fields: physical, mental, emotional, spiritual and managerial. The design of this proposal, considers to managers of an organization within a social macrosystem, with large processing capacity and high performance; and its directors as a strategic element. The health is conceptualized as welfare status that allows the development of human potential, essential for the health of an organization; and corresponds to the means to achieve peak performance in fulfilling its mission. Public health programs do not incorporate health management actions (specific risk group), this work promotes a comprehensive health program, preventive and with welfare; unlike the existing range of services, and that is partial and restorer. Health conditions not only represent the possibility of living many rewarding experiences, are also highly profitable for the organization.

Keywords: health, executives, organization and healthy organization.


Introducción

Por el análisis del perfil epidemiológico de la población sabemos que la población general mayor de 20 años, padece con frecuencia enfermedades orgánicas, entre las que se encuentran los eventos cardiovasculares como hipertensión; los cardíacos, anginas, cuadros isquémicos coronarios, etc.; trastornos metabólicos entre los que se cuentan la obesidad, cifras elevadas de colesterol, ácido úrico y glucosa; así como también diversos procesos respiratorios crónicos[1].

Estos problemas se asocian con frecuencia a los hábitos de vida, entre los que se encuentran el sedentarismo; adicción al café, tabaco, alcohol; dietas desbalanceadas con horario irregular; automedicación; mala disposición para la atención médica preventiva con pérdida de oportunidades para detectar enfermedades cardiovasculares, diabetes y diferentes formas de cáncer; insuficiente tiempo de descanso y esparcimiento, etc.

El agotamiento físico se constituye en un factor negativo y afecta mentalmente a las personas haciéndoles disminuir su potencial, capacidad de concentración, de análisis y toma adecuada de decisiones. En el terreno psicológico, el estrés tiene que ver con alteración de la dimensión afectiva, variabilidad del estado anímico,  falta de motivación personal y con la ausencia de satisfacción en la labor que se realiza. A su vez, la convivencia se hace más difícil porque el estrés se traslada hacia oros planos de la vida como la familiar y social, entonces las personas pueden volverse irascibles, aisladas y llegar a padecer cuadros depresivos o ansiógenos.

El que sufre una situación de riesgo, orgánico o psicológico, casi nunca es consciente del deterioro que padece, pues se encuentra inmerso de tal manera en su tarea, que acaba descuidando su propia persona y todo lo que le rodea.

 

Desarrollo

Los ejecutivos son personas, que por el solo hecho de compartir los riesgos de las personas mayores de 20 años son susceptibles a los daños ya descritos, pero no es difícil pensar que muchos de estos riesgos puedan ser mayores que en el resto de la población dadas sus condiciones de trabajo y de vida en general, como veremos más adelante.

De acuerdo con un informe del Dr. Ramón Cascabelos, Presidente del Centro de Investigación Biomédica Euroespes, el hecho de que un ejecutivo sufra una cardiopatía isquémica, tendrá otro efecto desfavorable: cuantiosas pérdidas económicas. El diagnóstico, tratamiento, la terapia psicológica, el tiempo perdido y otros gastos asociados llegarán a dar un total de 12,500 euros que tendrán que ser pagados entre el propio directivo y la empresa donde labora.[2]

Hay quienes han caracterizado dos perfiles: por un lado está el ejecutivo de cincuenta o más años de edad, con un estilo de vida desordenado, con sobrepeso, sedentarismo, hábito tabáquico y problemas de deterioro físico y por otro lado el ejecutivo joven, agresivo, con una filosofía de éxito, consumidor de estimulantes tóxicos y una inestabilidad psicoemocional importante, que acaba sufriendo trastornos psicofuncionales y orgánicos en el mediano plazo.

Es frecuente que ante una situación de problema, las personas –sin exclusión de los ejecutivos- en vez de buscar ayuda, se enfrascan más en ella, prolongando la jornada laboral, intensificando los riesgos porque erróneamente creen que ese es el perfil de su puesto, que no hay porqué cambiarlo, lo que significa sin duda aplazar la solución y agravar las consecuencias.

La salud de los ejecutivos es un tema que no se aborda de manera integral, solo en forma fraccionada. Desde la atención clínica existe una gran oferta de hospitales, consorcios médicos, laboratorios etc. que cuentan con servicios preventivos, de diagnóstico y tratamiento desde el punto de vista médico y algunas veces los complementan con orientación nutricional y psicológica; pero desde la salud pública, no existe como un grupo de riesgo específico, quizás porque se considera que la prioridad la constituyen los grupos de población numerosos, en condición de pobreza y desprotección social. En el plano organizacional, por su lado, los análisis así como las  intervenciones se abordan desde perspectivas amplias para el proceso gerencial, pero restringidas en el concepto de salud integral ya sea individual o colectivamente. No se dispone de información que evidencie estrategias de intervención conjunta.

Por lo anterior, es importante analizar la salud de los ejecutivos desde enfoques de integralidad, para poder encontrar soluciones a la atención de la salud, no solo al tratamiento de las enfermedades que puedan tener y dado el caso,  combinarlas con intervenciones en el campo gerencial ya que es en la organización, en el desarrollo de los trabajos y responsabilidades de los cargos, donde se exacerban las condiciones de que desembocan en riesgos para la salud física mental y social de los ejecutivos, es ahí donde pueden darse las condiciones para revertir esos riesgos y hacer de los ejecutivos, personas más saludables.

1.-Organizaciones y ejecutivos

Las organizaciones, son estructuras sociales creadas por personas que impulsan el desarrollo pues trascienden los logros de los esfuerzos individuales, poseen objetivos específicos, tienen una función sistémica inordinada a un sistema de mayor complejidad que es la sociedad y están influenciadas por ésta, lo cual se hace manifiesto a través de sus valores. [3]

Cada vez es menos frecuente el trabajo individual, el carácter gregario del hombre está presente en su forma de trabajo, de acuerdo con  diversos autores, vivimos en un mundo de organizaciones y la gran mayoría de las personas  se ganan la vida trabajando para una organización.

Las organizaciones constituyen un poderoso factor de identidad. El bienestar y el prestigio de los individuos a menudo se relacionan, por lo menos hasta cierto punto, con el bienestar y prestigio de la organización de la cual son miembros o empleados, lo que produce una especie de interés colectivo en perpetuar a la organización. Para constarlo, hay que observar la frecuencia con la que los individuos se identifican por lo que hacen, su trabajo y otras afiliaciones.

En los países desarrollados, la sociedad se ha convertido en una sociedad de organizaciones; éstas son medios para ejecutar determinadas tareas sociales y desde luego, son más fuertes cuando definen con mayor claridad sus objetivos, más efectivas, cuanto mejor se mida su desempeño.

Las organizaciones, las empresas, son el hábitat de los ejecutivos y son estos quienes  ejercen una poderosa influencia para la sobrevivencia y transformación de aquellas. Campbell Quick [4] precisa que los ejecutivos vienen a constituir un sector estratégico porque juegan un papel fundamental en el mantenimiento y desarrollo de la riqueza económica de una nación y sugiere que la salud de los ejecutivos es un factor contemporáneo que contribuye a la riqueza de la nación [5].

Según el Diccionario de la Real Academia Española (RAE)[6],la palabra ejecutivo viene del latín exsecūtus, participio pasado de exsĕqui, que quiere decir consumar, cumplir y en una de sus acepciones establece: “Persona que forma parte de una comisión ejecutiva o que desempeña un cargo de alta dirección en una empresa”.

Para nuestros efectos, los ejecutivos son  personas que ejercen los cargos de alta dirección dentro de una organizaciones, públicas o privadas, nacionales o extranjeras, o que son integrantes de comisiones ejecutivas en las organizaciones y en quienes recaen grandes responsabilidades empresariales, de hecho, el éxito o fracaso de las organizaciones que dirigen se atribuye a ellos.

Los ejecutivos corresponden a los grupos con estatus más elevado en la sociedad, suelen percibir salarios altos, la obligación de vestir de manera formal y tener agendas repletas de actividades que los llevan de una reunión a otra, con muy poco tiempo para atender cada asunto; se les sabe alejados de la vida familiar pues siempre ocupados en los asuntos de la organización se encargan poco de sus asuntos personales, los cuales delegan sin conocer muchas veces el curso de los mismos.

Debido a lo anterior es que en los ejecutivos, pueden intensificarse los factores de riesgo de la población mayor de 20 años descritos en la introducción de este ensayo, coincidente con lo que  Viktor Frankl describe como un derrumbamiento físico y psíquico prematuro de las personas sobre cuyas espaldas pesa una gran responsabilidad.[7]

2.-La salud de las personas es la base de la salud de la organización

La Organización Mundial de la Salud OMS, definió la salud como el “Completo estado de bienestar físico, mental y social y no solamente la ausencia de enfermedad en las personas”.[8]

Esta definición emitida en 1946,sigue siendo vigente y sólo es sencilla en apariencia pues tiene una intensa carga conceptual que nos remite a lo preventivo, lo colectivo y de bienestar, contrario a los enfoques del modelo más arraigadoen la actualidad que es medicalizado, individualista y restaurador.

Durante el siglo XX y particularmente en la segunda mitad de este, el mundo experimentó una sucesión de intensas revoluciones en distintos órdenes de la vida. Una de las más importantes es la revolución de la salud, la cual se pone de manifiesto en dos hechos inusitados: uno de carácter demográfico, la prolongada longevidad de la población; el segundo derivado del anterior, de tipo epidemiológico, caracterizado por el predominio de las enfermedades crónico degenerativas, es decir padecimientos no contagiosos, que aparecen como consecuencia de exposiciones prolongadas a ciertos riesgos, por predisposición genética o resultado del deterioro orgánico causado por el paso del tiempo.

Baste decir como ejemplo que en el siglo XX se alcanzaron las mayores ganancias en la esperanza de vida que en toda la historia en el mundo, inició con 30 años en promedio y cerró en 65 o más; en México la esperanza de vida en 1900 fue de 25.4 años y en 1995 ya era de 72.3[9], el resultado de ello es que cada vez se presentan más muertes por los padecimientos crónico degenerativos que nunca antes tuvieron oportunidad de aparecer, por la simple razón de que la gente moría en etapas de la niñez o juveniles.

En términos generales, en toda la población no existe una auténtica cultura de la salud o ésta es incipiente y lo mismo ocurre en el ámbito empresarial donde no se le asocia con el clima y cultura organizacionales. Sin embargo, no queremos decir que la salud no tenga ninguna presencia en las organizaciones, porque no es así, al interior de las empresas con frecuencia se aplican medidas de prevención de accidentes en el trabajo, otras para disminuir el estrés y desde luego, se otorgan prestaciones en servicios médicos curativos  en instituciones públicas o privadas, estas acciones a menudo no se miden, no se evalúan y menos se les relaciona con la productividad y rentabilidad de la organización, lo que las hace parciales y sin conexión con otros aspectos organizacionales para una mejor valoración de la salud en el desarrollo empresarial.

3.-La organización saludable

Las organizaciones poseen un gran poder transformador que en este caso, se propone se aplique en difundir y fortalecer la cultura de la salud, el autocuidado, que no es otra cosa que asumir la responsabilidad del bienestar propio; es decir que el viejo cliché de la salud como la moralina de una vida insípida y aburrida debe ser sustituido por el atractivo de una vida plena de satisfacciones múltiples, estructurante, de capacidad máxima, de diversión, dinamismo y sobre todo de redituable calidad de vida al paso del tiempo, lo que adquiere más valor ahora que la vida se hace cada vez más prolongada.

El concepto de organización saludable es reciente, pero las ideas que lo sustentan ya han sido consideradas desde hace tiempo, P. Drucker[10]escribió que las instituciones tendrán que aprender a lograr que la calidad de vida –y la salud es garantía de calidad de vida-, sea compatible con sus tareas principales, ello significa que la consecución de calidad de vida deberá considerarse una oportunidad que la administración pueda convertir en actividad lucrativa, el mismo autor afirmaba que el desarrollo es cuestión de energía humana más que de riqueza económica y la creación y orientación de la energía humana es un problema de administración.

La Organización Saludable busca cada vez con mayor intensidad modos complementarios de promover la salud y la seguridad, utilizándolas como condiciones para adquirir productos y servicios de otras empresas y para promocionar sus propios productos o servicios. La Organización Saludable es partidaria del desarrollo del bienestar físico, psicológico y social de sus miembros, no basta con prevenir algunos riesgos como ahora en algunos casos se hace, es necesario también potenciar los recursos activos –propios y/o de sus miembros- promoviendo la calidad de vida, la salud y el bienestar en su sentido más amplio, integral y perdurable.

¿Cómo se definen las organizaciones saludables? El término ‘Organización saludable’, en inglés ‘Healthy organization’ es un tanto nuevo y no hay consenso sobre su significado. Por su relevancia, destaca la propuesta del National Institute for Occupational Safety and Health de los Estados Unidos de Norteamérica (NIOSH) que considera las organizaciones saludables como “aquellas cuya cultura, clima y prácticas crean un entorno que promueve la salud y el bienestar de sus empleados, así como la efectividad organizacional”[11]. El NIOSH enfatiza la importancia de un clima organizacional en el que los directivos y empleados se sientan valorados y sea posible resolver los conflictos grupales. También se da importancia a las prácticas de dirección que premian la calidad en el trabajo, el apoyo de los supervisores y un liderazgo fuerte. Para el NIOSH los centros de trabajo saludables se caracterizan por reducir los trastornos del estrés, tener trabajadores satisfechos y productivos y por ser organizaciones rentables y competitivas.

Para los autores de este trabajo[12], la Organización Saludable se conceptualiza como “aquélla que permite la promoción y mantenimiento del más alto grado de bienestar físico, mental y social de las personas que la integran”.

Sintetizando, las dos definiciones anteriores se complementan plenamente, el NIOSH hace énfasis en los aspectos organizacionales, el segundo concepto acentúa en los factores de bienestar. A manera de enlace, podemos recuperar las expresiones de Gimeno P. quien plantea varias  dimensiones claves para una organización saludable como son: comunicación abierta; implicación y autonomía de los empleados; aprendizaje y renovación; valoración positiva de la diversidad; equidad institucional; y otras más entre las cuales destaca ‘el ambiente que potencia la salud’, que es uno de los ejes de  este ensayo y abordaremos más adelante[13].

La Salud surge en el mundo empresarial, de la integración de las personas y la comunidad que comparte objetivos, misión y desde luego riesgos. La salud es buena para la empresa porque le hace ser más productiva, efectiva y rentable; la empresa es buena para la salud porque es un derecho de las personas, que debe ser promovido y fomentado tanto por los ciudadanos, la sociedad y por supuesto, por las organizaciones. Consideramos que la salud debe ser reconocida de manera explícita, como un valor en la estrategia empresarial; a la luz de lo anterior, los directivos de las organizaciones, motivo de las reflexiones de este ensayo,  se reconocen como estratégicos del desarrollode un país por su poderosa influencia en las organizaciones ya que son ellos quienes toman las decisiones más importantes, son quienes dirigen, son quienes mandan y sus acciones, en mayor o menor medida, son resultado de sus condiciones de salud

 

4.-Intervenciones recomendadas y modelo de servicios

La mala cultura de la salud es generalizada y alcanza a los ejecutivos, a los hombres de empresa y al igual que al resto de la sociedad, también a ellos se dirigen acciones que tienen que ver más con atención a la enfermedad que con la promoción, cuidado y mantenimiento de su salud. Esto es una paradoja, porque podrían ser un segmento de la población que aprovechara mejor sus oportunidades de ser saludables. Resulta de lo más común, asociar el estatus elevado con óptimas condiciones de vida, porque para el grueso de la población, la mala salud comienza por el restringido acceso a sus servicios, lo que no ocurre con los ejecutivos, personas que muchas veces hasta financian a título personal o de sus corporativos, donaciones de equipos o recursos para la operación de programas de salud que benefician a otros.

Es cierto que los ejecutivos no tienen restricción alguna y económica  menos que ninguna, para acceder a servicios de salud, pero eso no quiere decir que hagan uso de ellos y también es cierto que de hecho su holgura da lugar al consumo ilimitado de productos y prácticas poco saludables y a veces de alto riesgo.

La cultura medicalizada predominante, la capacidad de pago y el poco tiempo que los ejecutivos disponen para su propia atención son algunos de los factores que los orillan a recurrir a chequeos médicos tan costosos como sus posibilidades económicas lo permitan, dentro y fuera del país, los cuales sólo comprenden la revisión de aspectos de salud física, exámenes de rutina, pruebas para identificar riesgos cardiovasculares, disminución de capacidad visual y auditiva, cáncer, etc. pero no abordan todas las áreas de bienestar que integran la salud y que hemos mencionado párrafos antes. 

Aunado a lo anterior, se ha desarrollado toda una industria de productos y servicios relacionados con la gratificación corporal que incluye hidroterapia, masajes, cremas, aceites, musicoterapia, aromaterapia, ejercicio físico, relajación, meditación y un amplio listado de servicios y exquisiteces proporcionados en el exclusivo ambiente de centros vacacionales que por sus altos costos, sin duda acentúan el estatus de sus consumidores produciéndoles satisfacción temporal, pero distan mucho de ser una propuesta integral y con base científica del bienestar efectivo que brinda el fortalecimiento de la salud.

Lo que proponemos es, que se ofrezca a los ejecutivos un menú de intervenciones en las áreas: física, mental, emocional y espiritual y se complementen con otras de tipo gerencial, que favorezca a la organización beneficiarse de las condiciones saludables de sus cuadros directivos, a la vez que se acrecienta en ellos el gratificante estado de bienestar ocasionado por formar parte de una organización saludable, que esto se arraigue y se convierta en práctica permanente.

Por sus características, los ejecutivos vienen a constituir un segmento del mercado de servicios de salud al que hay que atender con ciertas particularidades, por ello consideramos que el modelo de servicios debe reunir las siguientes características:

  1. Enfoque a la persona. Son las personas a partir de las cuales se crean las organizaciones, es la salud de aquellas lo que determina la salud de estas.
  2. Integral. No segmentar al individuo ni a la organización, sino que los conceptualiza como un todo.
  3. Sistémico. Ver al individuo, la organización y la salud como componentes de un macrosistema, la sociedad.
  4. Flexible. El cliente podrá elegir horarios y prestadores de servicios según sus propias necesidades.

 

A continuación, describimos de manera general los servicios que integran un programa de atención de la salud para los ejecutivos, propuesto por los autores:

Grupo 1. Medicina general

Se integra por actividades clínicas dirigidas a identificar las condiciones de salud de la persona. Incluye la elaboración de historia clínica completa, los siguientes exámenes de laboratorio: Biometría Hemática, Química Sanguínea de 27 elementos y Examen General de Orina, esta batería de exámenes es susceptible de ampliarse e incluir otros para búsqueda de cáncer: citología exfoliativa y marcadores tumorales. Todos estos exámenes están relacionados con los posibles riesgos de los pacientes. Acciones de seguimiento: entrevista breve personalizada, sesiones grupales y talleres. El protocolo no incluye  interconsulta con médicos especialistas ni la realización de estudios especializados; su necesidad será valorada en cada caso y motivo de recomendación al paciente.

Grupo 2. Orientación nutricional

Incluye consulta personalizada y sesiones de grupo orientadas a mejorar la alimentación de las personas y conducirlas a su peso normal, consta de: Evaluación de la dieta mediante recordatorio o frecuencia de consumo de alimentos; somatometría a base de mediciones de peso talla y circunferencia abdominal; en el nivel bioquímico se apoya en los exámenes de laboratorio del componente Medicina General, Química Sanguínea de 27 elementos. Acciones de seguimiento: entrevista breve personalizada, sesiones grupales y talleres. Al igual que en el Grupo 1, los servicios especializados se encuentran fuera del protocolo y darán lugar a recomendaciones específicas.

Grupo 3. Activación Física

Se propone obtener información para identificar el estado físico de las personas, su integridad y estado de funcionalidad para posteriormente indicar  las acciones motoras que contribuyan a activar o reactivar procesos fisiológicos para favorecer las posturas corporales adecuadas y agudizar los sentidos. Incluye: Exploración física, diseño de programa específico de activación física, adiestramiento en los ejercicios prescritos con regulación de la actividad física y su intensidad, recomendaciones específicas.

Grupo 4. Psicoemocional y trascendencia

Está compuesto por actividades grupales destinadas a promover la expansión de la conciencia y  la responsabilidad personal; el conocimiento y expresión de las emociones y estimular el sentido de la trascendencia. Está dirigida a la obtención de  información para identificar factores  psicológicos de riesgo a la salud laboral en dos dimensiones: Psicofisiológica, orientada a la identificación de factores orgánicos que influyen en el comportamiento, en este caso,  estrés laboral, Psicosocial, explora el comportamiento asociado a las condiciones del entorno, es decir el ámbito laboral; se llevan a cabo técnicas cognitivo conductuales,  imaginería, visualización, relajación y respiración profunda.

Grupo 5. Salud organizacional

Se refiere a intervenciones grupales para establecer un  diagnóstico del estilo directivo, particularmente en sus formas de integrarse y ejercer la autoridad, las características de su liderazgo, comunicación y motivación, así como la provisión de herramientas gerenciales que ayuden a mejorar el desempeño directivo.

Es deseable que los grupos de servicios propuestos se impartan en conjunto a los ejecutivos, para aproximarse a una operacionalización de la definición de salud y organización saludable en dos periodos al año y desde luego,  tomando en cuenta las actividades de los ejecutivos como clientes para no obstaculizar sus actividades.

Conclusión

Aun cuando es frecuente escuchar a las personas referirse a la salud como algo importante, en realidad esta solo cobra importancia cuando se ve perdida y eso es resultado de una falta de cultura en salud. Esta falta de cultura en salud también predomina en los ejecutivos, personas solventes económicamente y con amplio acceso a todos los servicios, pero que con frecuencia portan consigo estilos  de vida que acentúan los riesgos a su salud.

Los programas de salud pública no incluyen a los ejecutivos como un grupo de riesgo específico, a pesar de que lo constituyen claramente, debido a que se enfocan más a grupos numerosos cuya vulnerabilidad se asocia más a factores de desprotección social, sin tomar en cuenta que las situaciones de enfermedad que afectan a los ejecutivos pueden influir de manera negativa en la empresa y todas las personas que en ella trabajan.

Este trabajo pretende hacer notoria la importancia de este sector de la población como un segmento estratégico del desarrollo y definir en líneas generales una propuesta de atención a la salud de los ejecutivos, más allá de la prestación de servicios médicos y tomando en cuenta sus características, lo que hace de ellos un cliente menos común.

 

[1] ODS. Capítulo I. Una mirada a la salud de la población. Necesidades, Servicios, Políticas. Observatorio de la Salud. FUNSALUD. México: 1997. [Disponible en red] http://www.funsalud.org.mx/casesalud/observatorio/cap%20I.pdf

[2] Sanmartin N. La delicada salud de los ejecutivos españoles. Fundacio Factor Huma. España; 2006. [Disponible en red] http://www.factorhuma.org/index.php?option=com_content&view=article&id=3390%3ALa+delicada+salud+de +los+ejecutivos+espa%C3%B1oles&Itemid=36&lang=es

[3] Pfeffer J. Nuevos rumbos en la teoría de la organización: problemas y posibilidades.Oxford UniversityPress. México; 2000.

[4] Campbell-Quick J. Distinguished professor of leadership and organizational behavior.Biografía virtual. [Disponible en red] http://management.uta.edu/Dr.Quick/main.htm

[5] Campbell-Quick J. Financial Times Guide of Health.Deusto. España; 2006.

[6] RAE. Definición de ejecutivo.Diccionario de la Real Academia Española. España: 2010. [Disponible en red] http://www.rae.es/RAE/Noticias.nsf/Home?ReadForm

[7] Frankl H. La psicoterapia al alcance de todos. 7 Ed. España; 2003.

[8] OMS. Cómo define la OMS a la salud. Organización Mundial de la Salud, Página de preguntas. Ginebra: 2013. [Disponible en red] http://www.who.int/suggestions/faq/es/

[9] Campos-Ortega-Cruz, S. Cien años de mortalidad en México. México: 1997. [Disponible en red] http://www.revistas.unam.mx/index.php/dms/article/view/6693

[10] Drucker P. La gerencia. Ed. Ateneo, 8 ed. Argentina; 2004.

[11] NIOSH. Trabajadores de salud. Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional. NIOSH. USA; 2012. [Disponible en red] http://www.cdc.gov/spanish/niosh/topics/trabajadores.html

[12] Díaz-Pérez, LE, Barrera-Gálvez R. La salud: Estrategia empresarial para mejorar la efectividad organizacional. VI Encuentro de investigación en Ciencias Económico Administrativas UAEH, ISBN 978-607-482-279-3 México; 2012.Pag. 11

[13] Pinazo-García G. Evaluación de las organizaciones saludables: una propuesta metodológica. España; 2008. [Disponible en red] http://www.orpconference.org/2008/actividades/documentar/organizacionsaludable.pdf

 



[a] Profesor-Investigador de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo <<