Público/privado: el arte como heterotopía en el espacio cotidiano e íntimo

Resumen

Público/privado: intervenciones en casas del centro Pachuca es un proyecto de arte público que elaboramos en el año 2007. Pachuca es una pequeña ciudad a una hora de distancia de la ciudad de México. En contraste con esta enorme metrópoli, nuestra ciudad sólo tiene un número limitado de espacios oficiales para la presentación y difusión de las artes visuales. Sobre el lugar que se tenía contemplado construir un museo de arte contemporáneo se edificó el Museo del fútbol, lo que refleja de manera transparente cuál es el tipo de cultura que le interesa promover a nuestro gobierno. Debido a esta situación y a los recortes al presupuesto destinado al Fondo Estatal para la Cultura y las Artes, decidimos hacer un ciclo de seis intervenciones en el interior de espacios habitacionales del centro de nuestra ciudad como respuesta a nuestra situación cultural. Los objetivos eran generar nuevos públicos, presentar piezas de arte elaboradas con medios no convencionales y promocionar la noción de artista autogestivo, que no necesariamente requiere someterse a las condiciones de la política cultural del Estado. En este texto analizaremos las relaciones entre el espacio público y el espacio privado, así como otros conceptos relacionados con el espacio como lugar de experiencia individual o colectiva: “heterotopía”de Michel Foucault y “topoanálisis”de Gastón Bachelard. Posteriormente, vincularemos estas ideas con proyectos de arte para sitio específico y de interacción social en donde el museo y las obras salen de los espacios oficiales. Finalmente aplicaremos este análisis a las obras de nuestro proyecto Público/privado. Todo lo anterior con el objetivo de dar respuesta a la pregunta: ¿Qué tipo de producciones artísticas alternativas son viables en ciudades con una infraestructura precaria y conservadora para la promoción y difusión de las artes visuales?


Palabras clave:Arte, público, privado, heterotopía, topoanálisis.

Abstract

Public/Private: interventions into the Pachuca’s downtown houses, is an art project that we made in 2007. Pachuca is a small city about an hour away from México City. Face to face with this metropolis, Pachuca has limited formal spaces to make expositions and improve in a formal way the Visual Arts. The soccer museum is now the place where is supposed to be a contemporary art museum, this situation is a clearly effect about the culture that our government wants to our town. Facing the situation we decided to make about six interventions inside of living spaces in downtown, protesting about this fact that is affecting our culture we are looking for new viewers and present new works of art that are made of unconventional material by self-managed artists. That does not necessarily require the cultural government support.
In this paper, we are going to analyze the relationship between public space and private space as well as the related concepts with the space as an individual or collective experience: heterotopy by Michael Foucault and topology by Gaston Bachelard. Subsequently, we will link these ideas with site specific and social environment projects where the work is out of museums. Finally, we fuse this analysis to our project Public/private. All this in order to answer: What kind of artistic productions are viable alternatives in cities with a precarious and conservative infrastructure for the promotion and diffusion of Visual Arts?


Keywords:Art, public, private, heterotopy, topoanalysis

Desarrollo

I

En una conferencia radiofónica intitulada Utopías y heterotopías, Michel Foucault, señaló que generalmente existen 3 tipos de espacios[1] : las regiones de paso, las regiones abiertas y las regiones cerradas. Las primeras son las calles, el metro y las carreteras entre otras, las segundas son regiones para las paradas provisorias como los cafés, los hoteles y las playas; finalmente tenemos los espacios del reposo y el recogimiento, como puede ser el hogar de cada uno de nosotros.

También existen las utopías, es decir, lugares que no tienen ubicación en el mapa porque fueron concebidas por la imaginación y tienen lugar en “la cabeza de los hombres” [2] , son espacios ideales. Además de las utopías, Foucault subraya la existencia de contra-espacios o heterotopías, los cuales son “lugares diferentes que se oponen a todos los demás y están destinados a compensar, borrar y neutralizar a los demás espacios” [3].

Este filósofo francés cita como ejemplos de heterotopías, en el caso de los niños, la cama de los padres que se transforma en montañas o desiertos cuando nos ocultamos debajo de las sábanas, o la casa de campaña provisional en el jardín para jugar. En el caso de los adultos, existen varias heterotopías como las prisiones, los asilos, los burdeles y los cementerios.

En este sentido, Foucault propone la heterotopología o la ciencia de los espacios otros. No de las utopías, espacios sin lugar real, sino de las heterotopías o espacios absolutamente otros. Para ello propone seis principios básicos, de los cuales nos interesan aquí dos de ellos: el 3er principio, que se refiere a la yuxtaposición de espacios incompatibles, son ejemplos de este tipo de heterotopías el teatro, el cine y el jardín oriental, que representa todas las regiones del mundo; el 4º Principio se refiere a los cortes singulares del tiempo. No sólo se trata de la yuxtaposición de espacios sino de la yuxtaposición de tiempo o instantes, los cuales también son llamados heterocronías. Los museos y bibliotecas son heterotopías de nuestra época moderna. El archivo general de una cultura representa la “voluntad de encerrar en un lugar todos los tiempos, todas las épocas, todas las formas y todos los gustos” [4] como si ese espacio pudiera estar él mismo definitivamente fuera de todo tiempo.

Nosotros creemos que las nuevas heterotopías y las más interesantes están sucediendo en el arte. Un ejemplo de ello es la obra de teatro Boris Godunov, presentada en 2008 por el grupo Catalán La fura dels Baus. Esta obra inicia como un montaje teatral y convencional del texto escrito por Alexander Pushkin en el siglo XIX. Los primeros minutos de la obra narran la historia de un zar ruso y, de pronto, todo el teatro es tomado por un grupo de personas armadas y encapuchadas, secuestrando al público asistente a la obra.

Esta intervención es una reelaboración de un hecho histórico reciente, cuando en el mes de octubre de 2002 un grupo de terroristas chechenos irrumpieron en un teatro para exigir sus demandas al primer ministro ruso Vladimir Putin. Después de un par de días el primer ministro ordenó la intervención del ejército y murieron alrededor de 150 personas, entre terroristas y rehenes, a causa del efecto letal de un gas arrojado por los soldados.

En la obra de La fura dels Baus existe un desplazamiento en donde el espectador se convierte en actor, ya que debe seguir el juego para simular que se somete a las órdenes del grupo terrorista. Esta obra es una heterotopía porque superpone dos espacios a la vez, el espacio teatral y el espacio real más allá del escenario: butacas, pasillos, baños, etc. El público es espectador y actor simultáneamente, se ubica en el presente y en el pasado, en el año 2002, cuando sucedieron estos trágicos acontecimientos.

En artes visuales también existen ejemplos significativos de heterotopías como es el caso de la obra I, impostor de Mike Nelson. En 2011, para la 54ª Bienal de Venecia, el artista intervino el pabellón de Gran Bretaña replicando en su interior un antiguo bunker de Estambul. El espectador que recorría el interior del pabellón atravesaba una serie de pasillos y estancias idénticos a los que estaban en Estambul, para finalmente desembocar en un patio con fachadas y antenas que distaban mucho de ser Venecia.

Como veremos más adelante, las obras de nuestro proyecto Público/privado también son heterotopías, ya que yuxtaponen el espacio público de la galería con el espacio privado del hogar.

II

Hablar de espacio público y espacio privado en arte es complejo ya que la línea que los separa es difusa. Existen objetos y espacios que son públicos y otros que son privados, es decir, responden al derecho a la propiedad privada que es característico de nuestras sociedades capitalistas.

Los espacios públicos son administrados por el Estado y los pueden usar todos los habitantes de ese país: la calle, los parques y los espacios institucionales entre otros. Los espacios privados pertenecen a uno o varios individuos y pueden ser espacios habitacionales, espacios de trabajo y espacios de recreación que pertenecen a empresas como los estadios de futbol o los centros comerciales.

Para Louis Althusser no existe una diferencia real entre público y privado ya que el Estado está a favor de la clase dominante, es decir, de la clase burguesa:
El Estado, que es el Estado de la clase dominante, no es ni público ni privado; por el contrario, es la condición de toda distinción entre público y privado[5].

Como un complemento al pensamiento Marxista, Althusser señala que además del poder de Estado y del aparato de Estado señalados por Marx, debemos tener en cuenta los aparatos ideológicos del Estado. Generalmente el aparato de Estado es represivo y se conforma por la policía, el ejército, la administración y las prisiones entre otras[6]. En cambio, los aparatos ideológicos son un complemento que, como su nombre lo indica, moldean la ideología de las masas para que, a la par del aparato de Estado, las condiciones de producción y explotación sean perpetuadas.

Según Althusser los aparatos ideológicos del Estado, generalmente son de carácter privado: iglesias, escuelas, prensa, televisión, deportivos, galerías, teatros, etc.[7] . En arte, la distinción entre privado y público es confusa. Existen museos del Estado y museos de empresarios y coleccionistas privados. Entre todos, desde su ideología, definen lo que es o no es arte, lo que debe o no ser expuesto.

Se llama arte público a las obras que están fuera del espacio de la galería, generalmente son esculturas monumentales ubicadas en plazas o glorietas. De esta distinción surge una dicotomía entre afuera y adentro del museo, de la cual, a su vez, destacan tres combinaciones posibles: 1) el afuera adentro del museo; 2) el museo afuera y; 3) obras que combinan el adentro y el afuera al mismo tiempo.

En las obras que insertan el exterior a la sala del museo o galería tenemos la obra The clocktower, elaborada por Michael Asher en 1976. Para esta galería, ubicada en los últimos niveles de un rascacielos, Asher mandó quitar ventanas y puertas. Las personas que subían a la galería, a simple vista no encontraban ninguna obra, nada. Sin embargo, sí había algo que transgredía la pureza ideal del cubo blanco: el viento que entraba por los orificios de la arquitectura, los sonidos de los autos al pasar en la calle, el trinar de las aves que habitaban en el exterior, en fin, el entorno de la galería estaba adentro.

Probablemente la primera obra que plantea el desplazamiento del museo hacia el exterior es el Museo de Arte Moderno, Departamento de Águilas de Marcel Broodthaers en 1968. Para esta pieza el autor montó en su casa algunas postales en los muros y unas cajas vacías de madera, de las que se usan para transportar cuadros de un museo a otro. Entonces se autonombró director del museo e inauguró su casa como un museo frente a un grupo de invitados,“entre ellos Daniel Buren” [8].

Una versión relacionada con este proyecto es MUAC en tu casa. El Museo Universitario de Arte Contemporáneo de la Universidad Nacional Autónoma de México, a partir de una convocatoria para alumnos de preparatoria, lleva obras de su colección de arte contemporáneo para que sean presentadas al público en los hogares de los jóvenes voluntarios. Durante este periodo, artistas y curadores dan charlas en estos espacios privados, los cuales son abiertos al público por un breve periodo de tiempo. En 2015 se llevó a cabo la tercera emisión con buena aceptación, este proyecto ejemplifica a la perfección a lo que llamamos el museo afuera.

Finalmente, en el grupo de obras que articulan la tensión adentro-afuera destaca Home run del artista mexicano Gabriel Orozco. En 1993, en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, Orozco pidió a los habitantes de un edificio de apartamentos ubicados frente al museo que le permitiesen mostrar algunas naranjas en las ventanas de sus hogares. Esta obra era muy sutil, el espectador que se paraba en los enormes ventanales del museo tenía que buscar la obra afuera, en las ventanas del edificio de enfrente, tal y como una pelota de béisbol que vuela la barda que delimita el terreno de juego. Nuestro proyecto Público/privado también se relaciona con esta tensión entre privado y público, entre adentro y afuera, tal y como veremos a continuación.

III

Existen varios tipos de espacios privados, sin embargo, los más significativos tienen que ver con la intimidad, con nuestro hogar. El espacio privado del hogar está directamente vinculado con la afectividad. Nuestra casa ocupa un lugar determinante en la formación de nuestra personalidad. “Sin ella el hombre es un ser disperso”[9] .

Existe una relación directa entre la memoria y el hogar (nuestro primer hogar), por ello, Gastón Bachelard propone el topoanálisis, es decir, “el estudio psicológico sistemático de los pasajes de nuestra vida íntima” [10] . En el pensamiento de Bachelard también existe una sana tensión entre el adentro y el afuera, ambos son necesarios, debe haber equilibrio. La intimidad tiene que ver con estar bien, con bienestar, con el hábito de ocupar nuestra morada.

De la relación entre el espacio íntimo (privado) y el espacio público de la galería podríamos citar varias obras, sin embargo, nos limitaremos a hablar de las que hicimos para nuestro proyecto Público/privado. Intervenciones en casas del centro de Pachuca. Como mencionamos anteriormente, en el año 2007, por iniciativa de Miguel Ledezma, los y las artistas: Julia caporal, Enrique Garnica, Carmen Razo, Enrique Santoyo y Ana mayoral llevaron a cabo una serie de intervenciones individuales, inaugurando una pieza cada viernes durante seis semanas consecutivas.

Las reglas para hacer estas piezas en el interior de algún espacio habitacional eran simples y claras: 1) no se debería imitar el cubo blanco de la galería para montar obras convencionales, tales como pinturas y fotografías; y 2) el espacio en donde fuese emplazada la pieza debería formar parte del contenido de la obra. Entre todos acordamos hacer la difusión para invitar a la prensa, absorber los gastos del brindis de apertura y hacer simples catálogos de cada obra, los cuales fueron vendidos el día de las inauguraciones. Adicionalmente, Miguel Ángel García elaboró breves documentales del proceso de cada obra, los cuales vendía junto a los catálogos.

La primer pieza llevó por nombre Operativos vs la delincuencia de Miguel Ledezma, fue montada en el comedor de un departamento; seguida de Esto no es una fiesta de Enrique Santoyo. Posteriormente se inauguraron Objetos de identidad de Julia caporal, Entre muros y líneas de Ana Mayoral y Pane lucrando de Carmen Razo. Concluimos el ciclo con Tu madre es una santa de Enrique Garnica.

 

Miguel Ledezma, Operativos vs Delincuencia, 2007. Proyecto Público/privado. (Fotografía del autor)

 

Operativos vs la delincuencia fue la pieza con la que se inauguró el proyecto. Debido a la recién iniciada guerra contra el narcotráfico por el presidente Calderón en México en el año 2006, las calles se vieron invadidas por policías y soldados, todos los ciudadanos parecíamos ser sospechosos. En este sentido, Miguel Ledezma intervino el comedor de un antiguo departamento infestándolo de imágenes de policías y de soldados de juguete, evocando la intervención de la vigilancia policiaca en el espacio íntimo.

La obra era un mapa mental transitable que mostraba el diseño de una estrategia alterna a los operativos implementados por el gobierno. Operativos vs la delincuencia es un proyecto que el autor desarrolló , entre 2007 y 2012 como una propuesta de operativos ficticios no violentos en el espacio privado de la galería  y en el espacio público de la calle [11] .

Desde nuestro punto de vista, Objetos de identidad es la obra que mejor enlaza los conceptos de heterotopía y topoanálisis. Para esta pieza, Julia Caporal elaboró un conjunto grabados en madera con la figura de huellas digitales como un elemento que conforma nuestra identidad. Las huellas fueron impresas sobre objetos del espacio íntimo confeccionados especialmente para la intervención del espacio: un biombo, carpetas, una cortina, papel tapiz, forros para los sillones y un tapete entre otros.

Posteriormente los objetos fueron montados en la estancia de un departamento ubicado en un antiguo edificio. La apariencia de la estancia cambió al verse cubierta de imágenes de huellas digitales. Los objetos tejidos y confeccionados a mano daban una sensación de estar en una sala antigua, sugiriendo habitar la estancia en un tiempo pasado como en una heterocronía. La memoria se ponía en acción cuando los visitantes se conectaban con sus recuerdos, aquellos recuerdos de su primer hogar cuando eran niños.

 

Julia Caporal, Objetos de identidad, 2007. Proyecto Público/privado (Fotografía de la autora).

 

Enrique Garnica, por su parte, construyó una estancia con objetos de su colección de insectos y esqueletos de animales. Una mesa de centro combinaba especies vivas con objetos muertos. Algunas plantas tomaban líquido directamente de recipientes llenos de refresco de cola. La pieza Tu madre es una santa, pero tú eres un hijo de puta, reflexionaba sobre la destrucción que hacemos habitualmente al medio ambiente, a la madre tierra, incluso cuando estamos disfrutando la comodidad de nuestro hogar.

 

Enrique Garnica, Tu madre es una santa, 2007. Proyecto Público/privado. (Fotografía del autor)

 

Conclusiones

Con nuestro proyecto Público/privado conseguimos que las obras de arte saliesen de la galería para transformar la intimidad del espacio privado en espacio público por unos días. A las inauguraciones asistieron vecinos y aficionados al arte, además de reporteros. El proyecto dio buenos resultados, se había iniciado la formación de nuevos públicos y la aceptación de obras de arte no convencional en Pachuca, una ciudad en donde el público estaba acostumbrado a ver pinturas, grabados y fotografías principalmente.

Gradualmente, gracias al apoyo de la prensa, semana tras semana llegó más público, recibimos buenas críticas y los responsables de cultura del Estado y de la Universidad no faltaban a ninguna inauguración. Originalmente teníamos planeado hacer un segundo ciclo de intervenciones, sin embargo, hasta la fecha nunca se llevó a cabo. Posteriormente, algunos jóvenes artistas también hicieron de sus hogares espacios para presentar sus obras. Por nuestra parte, un par de años después formamos el grupo de investigación Arte y Contexto, en la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, desde donde hacemos proyectos y obras de arte público.

Consideramos que en ciudades como la nuestra, con pocos espacios para la exposición de artes visuales y regidos por una política cultural conservadora, el arte público es una opción necesaria. Jugar con las relaciones entre espacio privado y espacio público puede dar resultados muy interesantes. Las heterotopías del arte pueden transformar nuestra cultura y señalar el rumbo que debe llevar el arte. 

Referencias bibliográficas

Althusser, Louis: Aparatos ideológicos del Estado. Nueva Visión Buenos Aires, 1988, pp. 29.


Bachelard, Gastón: La poética del espacio. FCE, Buenos Aires, 2000, pp. 207.


Bishop, Claire (Ed.): Participation. Whitechapel Gallery, China, 2006, pp. 207.


Buchloh, Benjamin H. D.: Formalismo e historicidad. Akal, Madrid, 2004, pp.245.


Doherty, Claire (Ed.): Situation. Whitechapel Gallery, Londres, 2009, pp. 238.


Foucault, Michelle, “Utopías y heterotopías”, Fractal, n° 48, enero-marzo, 2008, año XII, volumen XII Link de acceso Consultado el 27 de abril de 2015.


Finkelpearl, Tom: Dialogues in public art. MIT press Londres, 2001, pp. 453.


Smithson, Robert: Robert Smithson. Selección de escritos, Alias, Distrito Federal, 2009, pp. 186.

 

 

[1] Michel Foucault, “Utopías y heterotopías”, Fractal, n° 48, enero-marzo, 2008, año XII, volumen XII, parr. 2.

[2]Ibid., parr. 1.

[3] Ibid., parr. 3.

[4] Ibid., parr. 10.

[5] Louis Althusser, Aparatos ideológicos del Estado. Nueva Visión, Buenos Aires, 1988, p.9.

[6] Ibid., parr. 10.

[7] Ibid., p. 9.

[8] Benjamin H. D. Buchloh, Formalismo e historicidad. Akal, Madrid, 2004, pp. 32-33.

[9] Gastón Bachelard, La poética del espacio. FCE, Buenos Aires, 2000, p. 30.

[10]Ibid., p. 31.

[11] Para ver más información e imágenes consulte http://www.miguelledezma.com/#!operativos-vs-delincuencia/c11u6

[a] Profesores-Investigadores de Tiempo Completo, miembros del Grupo de Investigación Arte y Contexto