En México, como en muchos países, se están aplicando sistemas de evaluación en todos los niveles educativos. En dichos sistemas generalmente la evaluación es llevada a cabo por organizaciones externas especializadas, a las que se les asigna el encargo de aplicar instrumentos de calidad, válidos y confiables, así como el seguimiento de dicha evaluación a las instituciones evaluadas, con la finalidad de ver a la evaluación como factor de cambio en la calidad educativa de la institución.
Palabras clave: Evaluación, Autoevaluación
In Mexico, as in many countries, they are being implemented evaluation systems at all educational levels. In such systems generally assessment is carried out by specialized external organizations, which are assigned the task of implementing quality instruments, valid and reliable, as well as monitoring of such assessment to the institutions evaluated, in order to see evaluation as a factor of change in the educational quality of the institution
Keywords: Assessment, Self
La evaluación está considerada como una de las actividades más importantes de la formación escolar, donde un sistema de evaluación de calidad permite llevar a cabo y orientar de manera correcta los diferentes aspectos de una institución; pero ¿Por qué y qué Evaluar? Dentro de las instituciones educativas es imperante que se tengan ciertos niveles y estándares que permitan llegar a una educación de calidad, por ello, la evaluación es una herramienta que nos permite, en primera instancia, detectar y conocer la realidad que esta dominando en la institución, después, va a ser la vía segura de toma de decisiones, así como el ser el instrumento ideal para lograr la calidad, ya que al conocer la realidad imperante se pueden tomar decisiones acertadas, con ello se alcanza la meta de la calidad educativa, sin olvidarnos que para que la evaluación sea válida, se debe tener una participación de todos los actores involucrados en la misma con una gran actitud de compromiso en todo el proceso, aunado a que es una actividad que primero se debe realizar en el ámbito interno, para después poder acreditar las evaluaciones hechas por los organismos externos.
Por ello las instituciones educativas realizan habitualmente procesos de autoevaluación, promueven la coevaluación, tanto en el alumnado como en el personal y buscan la evaluación externa, es decir hacen de la evaluación una cultura pues la consideran la mejor estrategia que permite el progreso y mejoramiento de la calidad institucional.
¿Por qué surge en las instituciones educativas, la necesidad de la evaluación y/o acreditación? Existen diversos factores por los cuales la evaluación es parte de las instituciones educativas, dentro de los principales existe la demanda de la sociedad por contar con instituciones que estén a la vanguardia de las exigencias que una educación de calidad, que estén acorde a los cambios que la región, el estado y el país requiere y demanda, que estén a la par y en condiciones de ser competitivos en este mundo globalizado en casi todos los ámbitos de la vida, donde la educación no podía ser la excepción, para lo cual las instituciones educativas empiezan a tener la necesidad de ofertar programas basados en modelos educativos de calidad, en donde con la información que nos arroja una adecuada evaluación, lo podemos y debemos lograr.
Dentro de las instituciones debe existir el interés de una mejora continua, la cual es importante debido a la diversificación educativa que existe, para ello, en el ámbito educativo, debe existir el interés por llevar a cabo una evaluación integral del sistema, ya sea por interés propio de la institución o por la necesidad requerida por alguna instancia externa ya sea de gobierno para obtener subsidios o una organización acreditadora, para la cual, se debe tener el compromiso de apropiarse y ser partícipes en todas las etapas que implica dicho proceso para alcanzar la mejora educativa. Empezaremos por la autoevaluación o evaluación interna la cual consta de una serie de actividades en la que todos los actores de la comunidad escolar deben someter sus procesos cotidianos y que les permita valorar la realidad, esto se debe realizar de manera conjunta y colegiada por todos los integrantes de la institución educativa, permitiendo la creación de los instrumentos con los criterios necesarios para medir la realidad imperante en dichos procedimientos, los cuales arrojarán los indicadores o parámetros a los que se pretende llegar.
Después de realizar la evaluación interna, con los indicadores que se determinaron según las necesidades de mejora de las instituciones, se debe llevar a cabo una evaluación externa, la cual deberá realizarse por una organización gubernamental, otra institución educativa calificada para ello o una organización privada, expertas en evaluación, lo cual le dará una confiabilidad al proceso como organismo acreditador, durante esta la institución previamente deberá prepararse con acciones palpables según los indicadores establecidos, para lo cual tiene que recabar a lo largo de todo el proceso evidencias que muestren como se llevan a cabo los procesos evaluables, por ejemplo: necesidades de formación docente, metodologías didácticas que se aplican en el proceso de enseñanza- aprendizaje, procedimientos de entrega de calificaciones, administración escolar, entre otros, para lo cual se deben designar responsables de dicha evaluación en la institución evaluada que realicen la recopilación de la información y análisis de la misma, así como la comunicación de resultados a las instancias correspondientes (directivos, maestros, administradores, sociedad en general etc.).
Con dichos resultados las instituciones educativas deberán realizar las acciones pertinentes, mediante planes de mejora continua, mismos que debieron proyectarse desde el inicio de la evaluación interna, solo que adecuándolos a los resultados obtenidos por la evaluación externa, ya que, como menciona: "El planificador de la educación se propone generar cambios y alterar la realidad educativa porque frente a ella se encuentra inconforme. Considera desde su perspectiva que las características de esa realidad educativa concreta son negativas o presenta deficiencias y carencias que debe mejorar" (Chávez, 1993), para que después se mantenga una evaluación interna constante y permanente a favor de la mejora en la calidad educativa.
Sin embargo las evaluaciones externas que están relacionadas con el tipo de contenidos educativos que se han de evaluar, entran en conflicto con las evaluaciones internas en el entendido de que las instituciones enseñan de una manera y las prueba evalúan de otra, por lo tanto no reconocen la diversidad de problemas planteados por distintos grupos de interés que existen en la institución como son: alumnos, padres, profesores, investigadores, directivos, etc.
Con ello, el manejo pertinente de una evaluación tanto interna como externa nos permitirá tener la habilidad de desarrollar e implementar las acciones y procedimientos efectivos que satisfagan los requisitos de la calidad deseada, según el modelo a seguir.
Para lograrlo se requiere de la participación activa de todos los miembros, así como el trabajo en equipo, innovación y mejora continua. Ya que sin un modelo a seguir, todo lo que se realiza, serán solo acciones aisladas, que no nos permitirán llegar a ser una institución con una calidad educativa, de acuerdo a los estándares y necesidades nacionales e internacionales de calidad.
Considerando que tanto la evaluación interna como la externa tienen una gran importancia en alcanzar la calidad dentro de cualquier proceso educativo, ya que, a diferencia de las empresas que se encargan de producir bienes, los cuales pueden ser sujetos a evaluaciones estrictas de control de calidad, dentro del ámbito educativo no es tarea fácil alcanzar niveles de calidad que permitan hacer competitivas a las instituciones educativas, siendo un proceso difícil, pero con el compromiso de todos los involucrados, se puede alcanzar.
Por ello la evaluación interna debe empezarse y ser parte permanente del quehacer diario de las instituciones de educación en cualquiera de sus niveles, haciendo de ella una actividad continua, ya que el evaluar es algo inherente de la naturaleza humana, y debemos adoptar una cultura de evaluación en pro de la mejora continua y de la calidad educativa. Pero que dichas actividades sean parte de un modelo a seguir, el cual estará provisto por las organizaciones externas especializadas en proveer los instrumentos necesarios para alcanzar la calidad educativa.
Ambos tipos de evaluaciones tienen varios puntos en común, debido a que el procedimiento a seguir y el fin son el mismo, ya que en ambas se tienen que cumplir tres etapas que consisten en la recolección de los datos, el tratamiento de los mismos y su utilización, sin embargo, cuentan con singulares contraposiciones, como por ejemplo, lo que concierne al rol de quien evalúa independientemente que las herramientas sean las mismas, son elaboradas de manera diferente , ya que el evaluador externo las utilizará de distinta manera, que el evaluador interno el cual funge como representante de la institución evaluada y si es el caso, será beneficiada de alguna manera con los resultados de la evaluación.
Con ello existen otras diferencias, en cuanto a los criterios, en una evaluación externa son fijados por los representantes del organismo externo, y cuando es una evaluación interna son definidos por o con los beneficiarios. En cuanto a la duración, la externa dura un tiempo limitado y conocido con anticipación y en el caso de la evaluación interna se trata de un proceso constante y muy largo que se debe adaptar al ritmo de los evaluados.
Por lo tanto, es necesario que se apliquen ambos tipos de evaluaciones, no verlas como dos situaciones diferentes, si no como dos procesos complementarios que en muy pocas o nulas ocasiones se podrían dar de manera aisladas, ambas con la misma importancia que por sí mismas revisten, en donde los procedimientos y fases de la evaluación se realicen en forma consensuada y colaborativa entre las instituciones educativas y los organismos evaluadores a favor de la mejora institucional y de una educación de calidad , que permita el desarrollo del país y ser competitivo en este mundo globalizado.
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[a] Profesora Investigadora de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo.