Tabla. 1: Clasificación de variables sobrepasadas/cruzadas. Fuente: Elaboración propia con base en la revisión de la literatura
El nuevo orden mundial ha incrementado la necesidad de encontrar una forma sustentable para vivir. En una sociedad contaminante es necesario estructurar una estrategia de coexistencia que dé al planeta la oportunidad de un crecimiento sustentable. Debido a las necesidades actuales de la población, la dinámica de producción, el estilo de vida de la sociedad, inconciencia ambiental, cultura y educación en el mundo, la contaminación ambiental se ha incrementado hasta niveles alarmantes. La contaminación ambiental, inequidad social y los problemas económicos son una realidad en todos los países, es por ello que cada país debe trabajar en estrategias para mitigar los problemas de sustentabilidad. El presente documento muestra un análisis de tres niveles que destacan como se está trabajando en el cuidado del ambiente.
Palabras clave:Ciudad verde, Dimensión ambiental, Negocio verde, Producto verde, Sustentabilidad.
New world order had increased the necessity to find a sustainable way to live. In a polluting society it is necessary to structure a coexisting strategy which gives to world the opportunity of a sustainable grow up. Due to actual population needs, production dynamic, society life style, unconsciousness, culture and education in the world, environmental pollution has been increased to alarming levels. Environment pollution, social unequally and economic problems are also a fact in every country, so that each country must work on strategies to mitigate sustainable problems. Present document shows a three levels analysis to realize about what we are working out to take care about the environmental scope of sustainability.
Keywords:Environmental dimension, Greener product, Greener business, Greener city, Sustainability.
Como se menciona en IPCC (2013), la actividad humana ha provocado cambios importantes a nivel global en el ambiente, con el estilo actual de vida, la raza humana provocará cambios irreversible en la superficie de la tierra. En México es posible observar la influencia negativa de la población sobre el ambiente. Hace varios años era posible visitar lugares en los cuales no existía huella de actividad humana. Hoy en día, se encuentra basura y evidencia de actividad humana en casi todo el país. La humanidad debe cambiar su estilo de vida para alcanzar una simbiosis con el ambiente.
Existen una serie de variables en el contexto ambiental, que hacen referencia a nuestro comportamiento e interacción con el ambiente a nivel global. La sociedad ha sobrepasado algunas barreras planetarias como la carga atmosférica de aerosoles, dispersión química en el ambiente y la acidificación en el océano. Además también hemos cruzado algunas otras barreras planetarias como biodiversidad, cambio climático, cambio de uso de suelo, entrada de nitrógeno a la biósfera y océanos, entrada de fósforo a la biósfera y océanos, y capa de ozono de la estratósfera (Fig. 1., Tabla 1)
Tabla. 1: Clasificación de variables sobrepasadas/cruzadas. Fuente: Elaboración propia con base en la revisión de la literatura
Fig. 1: Representación gráfica de las barreras planetarias (planetary boundaries), del centro y en verde el estado homeostático hacia afuera y en rojo el estado de sobrepase. Fuente: Elaboración propia con base en la revisión de la literatura
En IPCC (2014) se muestra que la influencia de la actividad humana sobre el sistema climático es evidente y que las emisiones de gases de efecto invernadero (del inglés Green House Gas – GHG) producidas por el hombre, son las más altas en la historia, también se menciona que el reciente cambio climática ha repercutido directamente sobre la población humana y los sistemas naturales.
Al realizar el análisis de los datos es posible ver que la actividad humana en efecto influye sobre el deterioro ambiental global.
En el caso de las anomalías en la temperatura promedio global combinada del planeta y los océanos, se puede observar que esta se ha incrementado alrededor de 0.9 Celsius de 1850 al 2010 (Fig. 2).
Fig. 2: Anomalías en la temperatura promedio global y anual combinada del planeta y los océanos relativas a los promedios en el periodo comprendido entre 1986 y 2005. Los colores indican diferentes conjuntos de datos. Fuente: IPCC (2014)
Al hablar del cambio en el promedio global del nivel del océano, se puede ver que el promedio en el nivel del océano ha cambiado alrededor de 0.2 metro de 1900 a 2010 (Fig. 3).
Fig. 3: Cambio promedio anual y global en el nivel del océano relativo al promedio en el periodo comprendido entre 1986 y 2005. Los colores indican diferentes conjuntos de datos. Todos los conjuntos de datos están alineados al mismo valor en 1993, que es el año en el cual se tienen los primeros datos de satélite (en rojo). La incertidumbre se indica por la sombra coloreada. Fuente: IPCC (2014)
En el caso de la concentración global de gases de efecto invernadero, los datos muestran que la concentración de CO2 (dióxido de carbono) aumentó alrededor de 290 a 390 partes por millon (ppm) entre 1850 y 2010; mientras que la concentración de of CH4 (metano) creció de alrededor de 805 a 1790 partes por billon (ppb) en el mismo periodo, al tiempo que la concentración de N2O (óxido nitroso) incrementó de alrededor de 270 a 320 ppb en el perido mencionado (Fig. 4).
Fig. 4: Concentración atmosférica de gases de efecto invernadero, dióxido de carbón (CO2, verde), metano (CH4, naranja) y óxido nitroso (N2O, rojo), determinados de datos de núcleos de hielo (puntos) y de mediciones directa de la atmósfera (líneas). Fuente: IPCC (2014)
En el caso de la emisión global de CO2 producida por el hombre, la cantidad de Gigatoneladas de CO2 emitido a la atmósfera cada año, se han incrementado de alrededor de 2.5 Gigatoneladas de CO2 por año, (GtCO2/año – en inglés GtCO2/yr) en 1850 hasta alrededor de 38 GtCO2/año en 2010 (Fig. 5).
Fig. 5: Global anthropogenic CO2 emissions from forestry and other land use as well as from burning of fossil fuel, cement production and flaring. Fuente: IPCC (2014)
Es posible constatar que la acumulación de emisiones de CO2 se ha incrementado en más 900 GtCO2 entre 1750 y 1970; este incremento ha sido de más de 2000 GtCO2 de 1750 a 2011 (Fig. 6).
Fig. 6: Emisiones acumuladas de CO2 producto del uso forestal y otros usos de la tierra así como de la quema de combustibles fósiles, la incertidumbre en la medición se muestra en las barras, con bigotes. Fuente: IPCC (2014))
En la figura 7 se muestra un espectro detallado acerca de las emisiones totales anuales de gases de efecto invernadero producidas por el hombre entre 1970 y 2010.
Fig. 7: Total anual de emisiones de gases de efecto invernadero producidas por el hombre (Gigatoneladas de CO2 equivalente por año, GtCO2e/año, en inglés GtCO2-eq/yr) para el periodo de 1970 a 2010 por gas: CO2 de combustión de combustibles fósiles y procesos industriales; CO2 de actividades forestales y otros usos de la tierra (Forestry and Other Land Use – FOLU); Metano (CH4); Óxido nitroso (N2O); gases fluorados considerados en el Protocolo de Kyoto (del inglés F-gases). De lado derecho se muestran las emisiones, utilizando coeficientes alternativos, de CO2e, con base en en el IPCC Second Assessment Report (SAR) y en valores del Fifth Assessment Report (AR5). A menos que se indique lo contrario, las emisiones de CO2e en la gráfica e incluyan los gases seleccionados en el protocolo de Kyoto (CO2, CH4, N2O así como gases fluorados) calculados con base en valores del 100-year Global Warming Potential (GWP100) del IPCC Second Assessment Report (SAR). Usando los más recientes valores del GWP100 del AR5 (barras del lado derecho) resultan valores más altos de las emisiones de gases de efecto invernadero (52 GtCO2e/año) debido al incremento en la contribución por parte del gas metano, sin embargo en el largo plazo los valores proyectados se mantienen estables. Fuente: IPCC (2014)
Aunque el cuidado ambiental no es solo labor de los gobiernos y las empresas transnacionales (Peña Nieto, 2010), son estas organizaciones las principales responsables en el logro de metas sustentables, con el principal objetivo de alcanzar la sustentabilidad en sus tres dimensiones (ambiental, económica y social). México tiene el potencial para una desastrosa confrontación o un avance constructivo sobre el desarrollo sustentable (Goldrich & Carruthers, 1992). Es importante para los actores sociales el cambio en la política y estrategias hacia lo verde, para lograr mejores horizontes de sustentabilidad, no solo a nivel local sino a nivel global.
Una característica de la sociedad moderna es la emisión de sustancias contaminantes al ambiente, particularmente aquellas de actividades industriales, mineras, de agricultura, de manufactura y domésticas (Delgadillo-López et al., 2011). Todos contribuimos al deterioro de la casa en común; revertirlo, es responsabilidad compartida que va desde cambiar hábitos, hasta adoptar políticas públicas audaces y atinadas (Camacho Quiroz, 2010).
Los aspectos que más contribuyen al impacto ambiental a nivel de los hogares son: (1) vivienda, que hace referencia al uso de energía y combustibles como gas LP y electricidad, principalmente, para mantener las actividades y funcionalidad del hogar; (2) alimento, por ejemplo, el consumo de carnes, cereales, frutas y vegetales, además de otros subproductos de animales y plantas; y (3) movilidad, como transporte a los centros de trabajo, educativos, centros de negocio y actividades de esparcimiento.
Los productos verdes (más ecológicos) son aquellos que se fabrican en una forma más aceptable durante su proceso de elaboración y tienen un menor impacto hacia el ambiente (Pickett-Baker & Ozaki, 2008). Es posible decir que un producto más ecológico es un producto que reutiliza algún(os) recursos considerados como basura o desperdicios y que ayudan a reducir el impacto ambiental. Existen varios factores que ejercen influencia sobre nuestras decisiones hacia hábitos pro-ambientales (Kollmuss & Agyeman, 2002). Como se menciona en Mohamad Azizan & Mohd Suki (2014), hay cuatro dimensiones relacionadas con la intención del consumidor para comprar productos verdes: Conciencia hacia la salud, actitud ambiental, etiquetas ecológicas y conocimiento ambiental.
Desde el punto de vista de las organizaciones, se distinguen cinco estrategias ambientales principales que pueden ser utilizadas: desarrollo de una marca ecológica; procesos de producción esbeltos (lean) y ecológicos; superar los requerimientos legales y normativos; eficiencia ecológica y liderazgo ambiental. En Orsato (2006) se propone una estrategia genérica de competitividad ambiental que se puede usar como marco de referencia para negocios que quieren volverse más ecológicos (Fig. 8).
Fig. 8: Estrategia genérica de competitividad ambiental. Fuente: adaptado de Orsato (2006)
Las iniciativas ambientales, generalmente surgen a lo largo de toda la cadena de suministro. Cada nivel de la cadena de suministro puede generar iniciativas ambientales para reducir el impacto ambiental de un producto o servicio. Los negocios ambientalmente amigables juegan un papel central en el uso de tecnologías de energía renovable y el empleo de fuerza de trabajo con actitudes ecológicas, para proveer servicios y bienes con energías limpias (Yi, 2014). En UNEP (2012) se menciona que las organizaciones que promueven activamente bienes y servicios más sustentables se benefician con el incremento del valor y reputación de la marca. Este valor agregado es el resultado del reconocimiento social de la marca, como un negocio ambientalmente amigable y es motivado por la percepción de beneficios indirectos como la reducción del impacto ambiental o el cambio climático.
En Mc Gregor-Fors et al. (2014) se sugiere que los estudios realizados en ciudades desde el campo de la ecología deben contener un enfoque multi-variable. En este sentido, existen algunos aspectos principales que ayudan a la transformación urbana y sustentable con beneficio para las ciudades y sus habitantes, como cambio en los estilos de vida y de consumo, mejores estrategias de gobierno y planeación, y el uso de la innovación y tecnologías verdes.
Producto verde
Como se ha hecho mención, un producto más ecológico ayuda a reducir el impacto ambiental, ya sea porque su proceso de producción es ambientalmente amigable o porque re-usa materiales considerados desperdicio o basura. El caso de IMERLLANTA A3P, puede ser considerado como un producto ecológicamente amigable.
IMERLLANTA A3P es un producto reciclado de llantas de caucho, creado en 2007, cuya función es la impermeabilización de construcciones. Su mercado objetivo es la clase media. Este es un producto que ayuda a reducir el impacto ambiental dado su origen de reciclaje. IMERLLANTA A3P se produce a partir de llantas de caucho recicladas con una garantía de al menos 10 años.
En comparación con los productos tradicionales que usan el método de termo-fusión consumiendo alrededor de un litro de gas butano (aproximadamente 1.6 Kg de CO2 emitido a la atmósfera) por cada 3 metros cuadrados, IMERLLANTA A3P recicla una llanta y media de caucho por cada 20 metros cuadrados con la emisión nula de CO2 al ambiente (fig. 9).
Fig. 9: Applying IMPERLLANTA A3P. Source: IMPERLLANTA [2]
Negocio verde
Los negocios pueden mejorar su eficiencia con la adopción de estándares reconocidos y la adopción de tecnologías limpias, los cuales conducen a un uso sustentable de los recursos UNEP (2012). Las firmas con nuevos modelos verdes de negocio buscan reducir costos, desperdicio e impacto ambiental, mientras crean valor con productos y servicios superiores (Nair & Paulose, 2014).
El caso de la empresa Mexicana CEMEX, es un caso de sustentabilidad. CEMEX es una compañía global de producción de concreto, es una firma multinacional que posee diferentes marcas a lo largo del mundo.
La organización es ambientalmente amigable dado que la gestión de sus procesos permite le mejor uso de la energía, materiales y recursos. Como ejemplo, su proceso de producción cuenta con sistemas de recirculación del calor residual usado, que es utilizado en las etapas de secado del proceso. El proceso también cuenta con sistemas de control inteligentes que reducen al mínimo las emisiones al ambiente, además de usar un sistema de filtros en el proceso de producción que también reduce las emisiones al ambiente. En la etapa de empaque cuentan con una política de mínimo desperdicio que permite hacer más eficiente el uso de materiales.
En CEMEX también cuentan con programas de desarrollo comunitario, como viveros para la implementación de campañas de reforestación, donaciones de concreto para la construcción de banquetas y guarniciones en comunidades pobres y academias para fortalecer los procesos de educación en comunidades pobres.
En su proceso de logística local, CEMEX prefiere la contratación de transporte local, en rutas más largas CEMEX prefiere el transporte por barco o ferrocarril. Al interior, CEMEX cuenta con programas de entrenamiento continuo para concientizar a sus trabajadores a cerca del uso y cuidado de recursos y del ambiente.
Ciudad verde
Algunas iniciativas en las ciudades pueden contribuir a la reducción del impacto ambiental. Un ejemplo de ello, es el caso del municipio de San Juan del Río, Querétaro, México.
San Juan del Río está ubicado en el centro del país, en el estado de Querétaro. Fue fundado como una villa de indígenas hacia el año de 1531. Durante el periodo de la Nueva España estaba dividido en tres feligresías. En 1855, en San Juan del Río, la industria y el comercio tuvieron un gran impulso. Entre las décadas de los 60s y los 70s en San Juan del Río comenzó el proceso de transformación económica, urbana y social. Durante la última parte de la primera década del siglo XXI, al presentarse la crisis económica y desaceleración económica mundial, en San Juan del Río surgieron problemas económicos como la pérdida de empleos y la reducción del consumo local con la consecuente baja en los ingresos del comercio local. Sin embargo, ello no fue impedimento para que el municipio continuara con paso firme en su desarrollo social, económico y urbano.
Es importante remarcar que el tratamiento de aguas residuales es una labor importante para el cuidado del medio. San Juan del Río es una ciudad verde porque tiene construidas 15 plantas públicas de tratamiento de aguas residuales y otras 46 plantas de tratamiento de orden privado, con las cuales procesa alrededor de 375.6 litros de agua residual por segundo, aproximadamente 11 millones 852 mil metros cúbicos de agua tratada por año (Fig.10).
Fig. 10: Planta de Tratamiento de Aguas residuales en San Juan del Río, Querétaro, México. Fuente: Junta de Agua Potable y Alcantarillado Municipal (JAPAM) [3]
Es muy importante mantener un proceso de entendimiento que ayuda a la toma de decisiones en el aspecto ambiental de la sustentabilidad con la finalidad de continuar con la generación de estrategias, iniciativas y soluciones que permitan al planeta recobrar su homeostasis. A través de productos ambientalmente amigables, empresas con compromiso ambiental y gobiernos ecológicamente orientados, es posible ayudar a reducir el impacto ambiental, debido a que se fomenta el mejor aprovechamiento o uso de materiales y recursos, así como la aplicación de políticas ambientales que se orientan al logro de una relación homeostática con el planeta.
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[1]Profesores Investigadores de Tiempo Completo Escuela Superior Tepeji del Rio. Ingeniería Industrial y Administración.
[2] http://www.imperllantascentro.com/nuevo.html
[3] http://japam.gob.mx/sjr/