Manual para la prevención de la violencia contra la mujer universitaria
Abstract
Está fuera de cualquier debate la existencia de un clima de violencia en nuestro país. Lo que no está claro en los diversos niveles de gobierno y en las esferas organizacionales son las formas y estrategias de atención de las dimensiones de violencia que padece la población, o un sector.
Existen excelentes esfuerzos y resultados. Falta, al menos en nuestro entender, reforzar y aumentar las acciones para atender la violencia focalizada y silenciosa que daña sistemáticamente a las personas. En especial, la violencia en contra de las mujeres.
La Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia representa un gran avance en la codificación jurídica del problema. Gobierno y organizaciones tenemos como reto garantizar la efectividad de su cumplimiento. Toda violencia contra la mujer es reprobable. Sin embargo, la violencia que conlleva el hostigamiento sexual, la violencia física, la agresión y la coacción sexual, constituyen dimensiones en las que aún falta un mayor compromiso. Esas dimensiones de la violencia son silenciosas (o silenciadas), culturalmente dejadas en la invisibilidad; son el tema que se menciona, pero no se atiende.