La Catedral de Tulancingo: Arquitectura al servicio de la devoción
Resumen
La construcción de grandes obras siempre ha involucrado la participación de varios sectores de la población, en el caso de la arquitectura religiosa, la iglesia requirió del apoyo de autoridades y feligreses para edificar sus templos y conventos. La grandeza de los mismos se consideró reflejo de la piedad y estabilidad económica de las ciudades que los construyeron. A lo largo de los tres siglos que duró el virreinato los estilos arquitectónicos fueron cambiando, sin embargo, siempre estuvieron al servicio de la gloria de Dios. La transformación de esta antigua iglesia franciscana en un magnífico templo neoclásico es prueba de esto.